15 de octubre

Se supone que uno tiene que hacer un post sobre la pobreza, porque hoy los bloggers (no me reconozco como tal) nos comprometemos en este Blog Action Day a hablar de un solo tema. La pobreza.

Yo querría hablar de Gema, que hoy le taladran el coco, pero ya hablaré de ella luego.

Siempre me gustó el nombre de la organización "make poverty history" porque no son siglas, o nombres amorfos sin sentido, sino que es un mensaje directo, shot al corazón: "has que la pobreza sea historia".

A veces estamos tan acostumbrados a algo que cambiarlo, por tenerlo tan incorporado, parecería imposible. Como genérico, es tan enorme, tan ajeno a nuestra vida, que muchas veces nos resulta intangible.

El otro día leía las estadísticas de un país. Decían que 12.5 millones de chicos viven en casas donde no tienen asegurada la comida. O sea, puede que hoy coman o puede que no. 12.5 millones. Ese país es Estados Unidos.

Los que podemos leer esto, que tenemos acceso a un pc, y tiempo o ganas para leer un blog, no tenemos la más remota idea de lo que es ser pobre.
Tener hambre.
Tener hijos con hambre.

Me acuerdo de una peli (A time to kill), con Sandra Bullock, Matthew Mcconaughey y Samuel L. Jackson donde, en el alegato final*, Matthew abogado le pide al jurado que en vez de imaginarse a la nena que habían violado negra se la imaginen blanca.
Gana el juicio.
Me quedó grabado. Y supongo que lo mismo tendríamos que hacer, cada minuto, con la pobreza, aunque ponerle cara a la palabra da mucho miedo.
La cercanía magnifica.
No imaginemos el nene pobre del mas allá, o la foto de UNICEF que hace que se te atragante la comida del domingo, o el documental que cambiás porque te hace sentir terriblemente incómodo, o la nena llena de moscas sin poder tomar agua.
En vez de eso, que tal imaginarme esa misma nena con los rulitos de olivia, o la cara de Anna?. Imaginarme el hambre de mi nena con la barriga hinchada.
Me resulta insoportable. físicamente insoportable.

Por eso me acordaba de ese cierre, porque pobreza sin cara, pobreza en millones es mucho mas digerible que si le ponemos cara. Acercamos el drama a nuestra vida.

Y cuando tiene cara es quizás cuando podemos pensar en ayudar. Pobreza deja de ser una palabra como látigo y se transforma en un reactor para la ayuda. Un poco de a poco es mucho para muchos. Un bol de arroz que yo aporte y tres de mi vecino que está mejor que yo, y cinco del de enfrente. Así muchos muchísimos que cambian la vida de alguien. En el otro lado del mundo o en el siguiente pueblo o vecindario.

Un poquito.
De a poquito.

* From A time to kill:
Now i'm gonna tell ya'll a little story.
I'm gonna, ask ya'll to close your eyes while i tell ya this story, i want you to listen to me, i want you to listen to yourselves. Go ahead, close your eyes, please.
This is the story about a little girl, walking home from the grocery store one sunny, afternoon. I want you to picture that little girl. Suddenly a truck races up. 2 men jump out, and they grab her. And they drag her (...)
Can you see her?
Her raped, beaten, broken body soaked in their urine, soaked in their semen, soaked in her blood, left to die. Can you see her?
I want you to picture that little girl.
Now imagine she's white.